Santa Maria de Vallbona

El real monasterio de Santa María de Vallbona de les Monges, se encuentra en la población de Vallbona de les Monjas, en la comarca de Urgel (Lérida). Es un monasterio cisterciense declarado como Bien Cultural de Interés Nacional con BIC RI-51-0000698 e IPAC 260.

Fotos tomadas en agosto del 2021
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Dormitorios de las monjas

 
Claustro
   
Iglesia
Presbiterio
     

Historia

El monasterio se fundó en el año 1153 como una agrupación de anacoretas por Ramón de Vallbona bajo la regla de San Benito en el valle de Poblet, en la frontera occidental del condado de Barcelona y en la denominada Cataluña nueva. Durante estos primeros años en que estuvieron en tierra de frontera fueron atacados por los sarracenos de Siurana que destruyeron todo lo construido. Poco después (1148) Ramón Berenguer IV entra en Tortosa, y en 1150 se construye el monasterio de Poblet, por lo que los eremitas se trasladan a Vallbona (situada más allá de la Sierra de la Cortada). En estos parajes frondosos se creó una primitiva iglesia dedicada a Santa María. Ramón de Vallbona ingresó en la vida monástica de Poblet llevándose parte de lo que había conseguido de la realeza, pero era independiente del cenobio. Se puede pensar que fuera debido a él que las monjas de Vallbona tuvieran esa especial inclinación a la recolección de hierbas y realización de remedios para las enfermedades a especie de boticarios.

En el año 1176, tras la muerte de Ramón de Vallbona, permaneció sólo una comunidad femenina que decidió acogerse a la observancia del Císter, fruto de un acuerdo que se contrajo con el Monasterio de Poblet, que admitiría a los eremitas varones que quisieran ingresar. Contaron con algunos de los recursos que cedió en 1163 el conde Ramón Berenguer IV. Para dirigir la comunidad se incorporá al año siguiente Oria Ramírez (1176-1185) procedente del monasterio de Santa María de la Caridad de Tulebras (Navarra). El monasterio adquirió reputación y atrajo a damas de la nobleza catalana (hecho que explica que muchas de las abadesas tuvieran en su losa funeraria el escudo de la familia en lugar de su efigie grabada). También se granjeó el favor real, demostrado por las visitas de Alfonso II el Casto y su esposa Sancha de Castilla o Jaime I el Conquistador, que se alojaron en diferentes ocasiones y participaron en su construcción. A finales del siglo XII recibieron del papa Inocencio III la inmunidad ey protección de bienes y una bula otorgada en el año 1201 que regulaba la clausura y aseguraba su independencia del episcopado.

Debido a las donaciones y testamentos recibidos, fue adquiriendo fuerza entre los siglos XII y XIII en el condado de Urgel y consiguió el reconocimiento jurídico bajo el mandato de la abadesa Saurena de Anglesola (1379-1392) que compro al rey Pedro III de Aragón la jurisdicción civil y criminal de todas las posesiones del monasterio y de todas las villas i terminos integrantes. En esta primera etapa formaron la comunidad unas 150 monjas, la mayoría pertenecientes a la nobleza catalana, como los Cardona, Cervera o Queralt.

Dado el linaje de muchas de sus religiosas, y que éstas eran personas versadas, alcanzó gran fama su scriptorium y su biblioteca, ya que copiaron e ilustraron códices (se conservan al menos 14 del siglo XIII).

Durante este tiempo la abadía iba creciendo por partes aprovechando las donaciones recibidas, así se dilata el tiempo que transcurre entre el comienzo en el periodo románico y la finalización ya en periodo gótico. Comenzó con la abadesa Oria con una donación de la reina Sancha y la concesión de las rendas suficientes. A finales del siglo XII ya constituían el dominio de Vallbona algunas propiedades en los términos poblacionales de Colobrers, Eixaders, el Vilet, Llorenç, Maldanell, Tárrega, Preixana, Barbens, Linyola y Sant Martí. Así el cenobio comenzó a tener cierto prestigio entre la nobleza catalana al ingresar cada vez más hijas nobles de famílias como Cervera, Anglesola, Urg, Caldes, Cervelló, Cabrera, Sentmenat, Queralt, Guimerà, Timor, Òdena, Rubió y un largo etcétera.

Fue tal la buena sintonía que tuvo la reina Violante de Hungría (segunda esposa de Jaime I el Conquistador) con las monjas de Vallbona que quiso ser enterrada en esa abadía, y así fue cuando al morir en Huesca a los 35 años, tuvo una comitiva mortuoria presidida por su marido que la llevó hasta el monasterio. También dejó en testamento que su tercera hija Sancha también fuera enterrada entre esos muros, y dejó prevista la repatriación de los restos de su hija.. Sancha murió en tierra Santa, en el Hospital de San Juan de Acre siguiendo los pasos de su tía materna Santa Isabel.

La época más prospera del cenobio fue bajo el mandato de la abadesa Elisenda de Copons (1340-1348), y fue el alma-mater de las construcciones góticas más importantes del monasterio de Santa María de Vallbona. También durante su mandato se concedió (con petición del rey y del abat de Poblet), el papa Clemente VI concedió al abad y sucesores el privilegio de usar mitra, anillo y las restantes insígnias pontificales, extensivo también para las abadesas. Lo que imprimiría cierta independencia del poder local de la Iglesia. 

Obra de esta abadesa fue el prodigioso cimborrio que se sustenta sobre el tercer compartimiento de la nave y que no tiene fundamentos, ni columnas ni paredes que lo alcen de tierra, sino sobre una bóveda ya construida, y fue considerada por Josep Puig i Cadafalch como la obra gótica más atrevida de la arquitectura catalana. En esa época, en que la peste negra asoló la Cataluña medieval se cree que murió la abadesa en 1349, y por eso se representa muerta con un sudario en su losa sepulcral entre la abades de Anglesola y Almanda de Aviñón. A pesar de que en Poblet hubo muchos muertos (150 monjes y 30 legos) por culpa de la peste, en Vallbona no consta que hubiera muchas bajas entre las monjas.

En el siglo XV experimenta cierto declive a causa de factores externos al cenobio, como la Guerra Civil catalana (1462-1472) que fue el enfrentamiento entre la llamada "Cataluña vieja" contra Juan II de Aragón, y especialmente las disposiciones del Concilio de Trento prohibiendo la existencia de monasterios femeninos aislados. En ese tiempo la abadesa Estafanía de Piquer optó por hacer una interpretación de la órden papal y creó la población de Vallbona de las Monjas en derredor del cenobio con casi toda la población de Montesquiu (pueblo ahora en ruinas en el término de Vallbona de les Monges). También es destacable el hecho que se les prohibiera hacer remedios contra las enfermedades en que las monjas eran maestras y se creó el puesto de boticario varón en el cenobio de tal forma que podrían seguir realizando sus remedios con la condición que el boticario no podía llevarse ni un sólo material del monasterio. Las monjas entraron en una clausura más estricta y cedieron parte de las casas que había dentro del monasterio (las monjas vivían agrupadas según casas nobiliarias).

En el siglo XVI se incrementa otra vez el declive por la guerra dels Segadors (1640-1652) y especialmente por los litigios entre las casas de la órden (Santa María de Poblet) y el episcopado que dejaron muy diezmada su economía. La Guerra de Sucesión (1705-1717) y la Gran Guerra o Guerra del Rosellón (1788-1795) acentuaron sobremanera la decadencia del monasterio, ya que fueron numerosas villas las que se alzaron contra el dominio del cenobio.

En el año 1832 se alzaron dos plantas nuevas sobre el claustro que lo afearon sobremanera, y el 1835 la desamortización de Mendizábal les hizo ausentarse por seis meses, aunque el monasterio se salvó y continuó con su vida monástica, eso sí con las penalidades que daban las cada vez más exíguas rentas que cayeron hasta finales del siglo XIX.

El 3 de junio de 1931 se produce la inclusión como como Bien Cultural de Interés Nacional con BIC RI-51-0000698.

Durante el periodo de la Guerra Civil española las monjas debieron abandonar el cenobio y se produjeron importantes destrucciones de mobiliario y de objetos de valor, aunque se pudo salvar el preciado archivo y algún mobiliario litúrgico.

En las última décadas del siglo XX la Generalitat de Cataluña ha emprendido obras de restauración urgentes en dos fase (1986 y 1997) liberándo el claustro de la sobrecarga que soportaba,restauración y consolidación del campanario y la recuperacion de los dormitorios de las monjas.

En 2017, se ha realizado una nueva intervención en los dormitorios que forman parte de la parte expositiva y visual (con presentaciones sobre sus muros) del comienzo de la visita guiada. Para ello se han llevado allí parte de los utensilios de botica, como un armario cordial o diferentes morteros, matraces y una colección de potes de botica (de porcelana) que datan del siglo XIX.

En la actualidad hay 6 monjas de clausura en el monasterio, además de estar apoyadas por diferentes personas para el servicio turístico.


Arquitectura

El monasterio ha perdido parte de su disposición urbana que tienen los recintos de los monasterios cistercienses (hostería, hospital de pobres o peregrinos, bodega y otros servicios agrícolas) de los servicios externos a las monjas o la clausura. Todo ello se debió en parte al Concilio de Trento y la decisión de la abadesa sobre abandonar estos recintos externos para darlos a los nuevos vecinos venidos de Montesquiu para evitar la desaparición del cenobio.

Hasta comienzos del siglo XX había partes de la muralla que cerraba el conjunto y una de las tres puertas que tenía (de arriba). Actualmente en algunas casas del pueblo se pueden ver restos del hospital y de la procura del segundo recinto (Vallbona tenía dos recintos) y dos arcos diafragmáticos de la bodega. Otros edificios como el palacio abacial y la portería sufrieron profundas modificaciones en los últimos siglos. También se modificaron los principales edificios medievales que circundaban el claustro, como el refectorio, la cocina y el calefactor.

Disposición de las diferentes estancias del Monasterio sobre el mapa y los colores de las diferentes épocas:

1. Iglesia (siglos XII - románico y XIII - gótico)

2. Portada románica del siglo XIII

3. Claustro (siglos XII al XVI en estilos románico, gótico y neo-románico)

4. Sala capitular (siglos XIV y XV)

5. Antiguo dormitorio común (siglo XIV)

6. Dependencia exteriores (siglos XVI-XVII)

7. Celdas actuales (siglo XX)

 

 


La iglesia

El templo acusa el paso del románico al gótico: comienza a construirse en el siglo XII pero no se termina hasta el siglo XIV. De esta manera las bóvedas de la nave son de crucería (góticas) mientras que las de los ábsides son semicirculares (románicas).

La iglesia, de una sola nave, con planta de cruz latina (a diferencia de las de Poblet o Santes Creus, que son de tres) es propia de los cenobios cistercienses femeninos. La nave tiene una cabecera acabada en tres ábsides cuadrados. El central más grande que los dos laterales, tiene tres oberturas románicas de medio punto que contienen los sepulcros de Violante de Hungría y de su hija Sancha, los cuales están cubiertos con punturas heráldicas. El de Violante de Hungría fue restaurado a principios del siglo XXI por iniciativa de los gobiernos húngaro y catalán.

En la intersección del crucero y la nave se alza un cimborrio del siglo XIII octogonal, sostenido sobre trompas, cubierto por una bóveda de crucería con aperturas ojivales, de tradición románica pero de ejecución gótica. Un siglo más tarde se repitió la misma solución sobre un tramo de la nave para realizar un campanario esbelto (la nave aún estaba en construcción).

Todas las bóvedas son cistercienses que cargan sobre ménsulas situadas a media altura. Están decoradas con motivos geométricos y vegetales propios de la estética cisterciense en el crucero y son lisos en la nave. Los que aguantan el cimborrio son particularmente interesantes, y dos de ellos rompen la norma y muestran temas historiados.

La iglesia tiene dos puertas, una en el segundo tramo de la nave, bajo el campanario, que comunica con el claustro y la otra en el brazo norte del transepto, que daba al antiguo cementerio del monasterio, hoy convertido en la plaza del pueblo.

Exteriormente la nave tiene contrafuertes que aguantan los arcos torales del crucero. En el muro de la galería norte del claustro hay dos ventanas románicas. El campanario tiene unos contrafuertes acabados en pináculos y paramentos terminados en piña y grandes ventanales. Toda la iglesia está recorrida por una cornisa con modillones lisos en la nave, pero esculpidos con temática profana en la cabecera. Esta decoración propia del románico de transición se aparta de la ortodoxia cisterciense.


El claustro

El claustro de Vallbona está desplazado por la Sala Capitular hacia los pies del templo. La planta está condicionada por la orografía del terreno, y también está construido en forma trapezoidal, siendo reformado el primer tramo románico con la adición de una parte más.

Las cuatro alas del claustro son de periodos diferentes:

El más antiguo (reformado para alargarlo con posterioridad) es el lado sur que contiene arcuaciones románicas (en grupos de 3) sobre columnas sin decorar que fue construido a mediados del siglo XII. Esta ala está cubierta por cuatro tramos de bóveda de crucería, y los arcos estructurales descansan en tres pilares del patio que están reforzados con contrafuertes.

El ala este ya es diferente y presenta el mismo tipo de arcuaciones, pero se les ha añadido una linterna (provenientes de influencias mudéjares) que se ha añadido en la parte superior para dar más luminosidad a la galería. Seguramente se construyó un siglo más tarde y contiene cinco tramos cubiertos con bóveda de crucería. En esta galería algunos capiteles y ábacos están decorados con temática vegetal y motivos geométricos entrelazados. Por este lado del claustro de accedía al antiguo dormitorio, dónde actualmente está la farmacia y la enfermería y a la Sala capitular.

El ala norte es de estilo gótico construida en el siglo XIV al mismo tiempo que se construyeron las bóvedas de la nave, como indican los escudos de las abadesas Anglesola presentes en algunos elementos decorativos. Forma cuatro tramos de bóveda de crucería más altos y esbeltos que los anteriores y tiene dos grandes finestrales de arco apuntado.

En el ala de poniente es neorrománica (como las dos primeras) rehecha en el siglo XV con elementos antiguos en tiempo de las abadesas Blanca y Aldonza de Caldes, que dejaron numerosos escudos. Esta ala se reformó para dejar de ser el claustro cuadrado y así, con la adición de una parte en el ala más antigua, se podía aprovechar mejor la luz y calor solares que incidían sobre el patio.


Sala capitular

De planta rectangular y cubierta por dos tramos de crucería que descansan en los muros por ménsulas. La puerta da al claustro, es esbelta y de doble haz, repitiendo el esquema gótico de los ventanales del ala norte del claustro en periodo de una abadesa de la familia Anglesola, presumiblemente durante el siglo XIV.

En el siglo XV las abadesas de Caldas, reformaron el suelo y decoraron la sala, de tal forma que se ve en las paredes el borde sobrepuesto a la edificación anterior. Llevaron a la Sala las sepulturas de las antiguas abadesas y pusieron en la cabecera una imagen de la Madre de Dios de la Misericordia, de terracota policromada atribuida a Pere Johan, el escultor del retablo de Santa Tecla de la catedral de Tarragona.

 


Dormitorios

Es un edificio largo adosado al capítulo y al ala este del claustro, en dónde se encuentra la puerta de acceso. Es una estancia menos conocida del monasterio que ha sido recientemente restaurada que contiene los típicos arcos diafragmáticos con cubierta de caballetes de madera. Está formado por dos salas, la más grande dedicada a dormitorio y la otra algo más reducida dedicada a farmacia y enfermería.

La nave de la farmacia tiene cuatro arcos apuntados que arrancan directamente del suelo, y está más baja de nivel que el claustro, por lo que se cree que pudiera ser uno de los edificios antiguos del monasterio, construida a finales del siglo XII o principios del XIII.

La nave del dormitorio es más tardía y está a un nivel más alto que la primera es más larga y esbelta con arcos apuntados cargando sobre semicolumnas y capiteles troncopiramidales lisos. La cronología apunta que esta nave se pudo realizar en el siglo XIII o XIV, aunque algunos historiadores piensan que fue ora de la abadesa Blanca de Caldas porque en la dovela más alta de los arcos diafragmáticos consta su escudo. Pero no es novedad porque se encuentran escudos de las abadesas de Caldas por todo el monasterio.


Enlaces

Monsterir de Santa Maria de Vallbona

Monestirs de Catalunya

ICGC (Instituto cartografico de Cataluña)

La ruta del císter

Patrimoni GENCAT

Solo cultura, Valencia y Benimàmet - jdiezarnal


Bibliografia

Josep Maria Sans i Travé, Precedents i orígens del monestir de Santa Maria de Vallbona: (1154-1185), Pagès, 2002, 88 p.

Gonzalvo i Bou, Gener y Sans i Trave, Josep Maria (1998). Vallbona, Guía Histórico-Artística. Milenio Editorial. ISBN 978-84-89790-28-5

Mestre i Godes, Jesús y Adell, Joan-Albert (2001). Monestirs de Catalunya. Barcelona, Edicions 62. ISBN 84-297-4973-X

Ramos, M. Lluïsa (2005). Catedrals, monestirs i grans edificis religiosos. Barcelona, Geoestel.  ISBN 84-96295-15-X.

Tesis doctoral El monestir cistercent femení català durant el primer segle borbònic espanyol. Santa Maria de Vallbona (1701-1802). Marta Cusó i Serra (en catalán)

El proceso constructivo del monasterio de Santa MAría de Vallbona de les Monges: consideraciones cronológicas y nuevas propuestas interpretativas. Xenia Granero Villa (artículo de Codex Aquilarensis 34)


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